Hay técnicas que pueden hacer que un mp3 suene mejor.
Aunque es cierto que lo más importante para conseguir un mp3 de buena calidad es partir de un buen master.
¿Y qué es un buen master? Un master que no clipee mucho.
Uno de los mayores enemigos del mp3 es la distorsión producida por los clips.
Cuando codificamos para mp3 el códec separa los transitorios del resto del sonido. Es decir, procesa por separado los transitorios y los sonidos continuados o armónicos.
Esto se hace así porque en los transitorios es necesaria una buena resolución temporal y en el resto una buena resolución de frecuencias (o espectral).
No se pueden tener las dos cosas a la vez, por eso una fórmula decide qué es un transitorio y qué es un sonido continuado.
Si decide transitorio, el codificado se hace con buena resolución temporal, seguirá los vaivenes dinámicos, pero a cambio tendremos una mala resolución de frecuencias, es decir, no distinguirá bien las componentes de frecuencia de ese transitorio, con lo que éste al ser descodificado se inventará frecuencias que no estaban antes ahí. Esto no es grave si se mantiene a ciertos niveles.
Ahora imaginemos que los transitorios los tenemos clipeados, bien cuadraditos vamos. Un clip es casi una onda cuadrada, que es lo mismo que decir armónicos para dar y tomar. Al codificar este transitorio clipeado podremos mantener más o menos bien su dinámica pero, el alto contenido de armónicos del clip, el códec lo interpretará prácticamente como ruido, puro ruido. No hay suficiente resolución espectral como para interpretar esas frecuencias separadamente por lo que el códec crea una especie de "potaje espectral" bastante pesado de digerir para nuestros oídos.
Es cierto que el efecto "cocktail party"
http://en.wikipedia.org/wiki/Cocktail_party_effect, ayuda a llevarnos al engaño de que todo está "casi" bien, pero la realidad es que sale un sonido con falta de precisión y claridad en los ataques, lo que conlleva a que todo suene más confuso y fatigoso de escuchar.
En el mastering, una forma de evitar clips puros y duros es con limitadores lookahead y teniendo cuidado de respetar la fase, ya que variación de fase significa variación del timing de los componentes de frecuencia del transitorio, de lo que puede resultar su "ablandamiento" o destrucción al convertir a mp3.
También existen "pre-procesos" que pueden mejorar la calidad de los mp3 desde el master ya finalizado.
Por ejemplo, los procesadores de Netcasting, especializados para bitrates bajos, usan tanto técnicas tradicionales, procesadores dinámicos y eq, como procesos espectrales inversos, basados en cómo va a ser codificado el sonido.
Para bitrates altos también existen pre-procesos espectrales que mejoran el sonido significativamente, aunque también hay que decir que la mejora depende de la calidad del master original.
Los mp3 a bitrates altos funcionan de diferente forma y son siempre objeto de discusión, unos piensan que no es necesario preprocesarlos y otros que sí. Yo estoy entre los que piensan que sí hace falta, ya que un mp3 a 320 no es un wav, por mucho que se diga que la conversión es transparente. Un wav aguanta mejor los clips que un mp3 y por eso, ya de entrada, el master para mp3 debe ser tratado de diferente forma.
Un master que me ha traído de cabeza es el último CD de Lady Gaga, clipeado a más no poder, y muy difícil de sacarle algo positivo en su conversión a mp3. Al final pude vencerle, pero me costó un buen rato.