Alguien escribió:
Es muy facil ser solidario cuando te lo agradecen, la gracia esta en serlo cuando no.
Me sigues imprecionando chusticiero, impartiendo chusticia. Hoy estas como inspirao
La verdad es que siento que estas cosas que pasan e la música también pasan en todos lados.
Hoy por hoy no vivo de la música, aunque creo que estoy trabajando en ello para en un futuro (espero no lejano) lograrlo. Hoy soy un Auditor de un ente gubernamental, que le toca evaluar als aduanas de mi país (un asco todas). Y que piensa en música mientras trabaja, y cuando llega a su casa lo primero que hace es agarrar su PC y su guitarra.
Con mi experiencia laboral y como músico he notado que en todos lados es igual, consigues gente que sabe mucho y te enseña con humildad, otros que también saben pero morirán junto a sus ideas por no haberlas compartido; y otros que no saben ni donde están paraos y se la tiras de que son la última pepsi cola del desierto.
La diferencia es que en la música, además de encontratelos arrogantes, también son bohemios, o el típico prototipo del músico (tienes que llear la pinta porque sino te miran con cara de loco).
En algunas oportunidades, me ha tocado ir a la sala de ensayo con la corbata y camisa porque no me dio chande de cambiarme, y empiezan todos los come gato a mirarme con cara de no sé qué. Peor me ha tocado cuando me toca con un técnico de sonido que me mira con reojo cuando ve que conozco del tema.
Aquí en Venezuela, la gente conoce pocos equipos, son pocas las tiendas de música con instrumentos y equipos de verdad. Me ha tocado en presentaciones en vivo, que cuando me ven con la POD Xt Live y los dos amplis crate, me ven con carara de carajito rico (como si nno hubieran equipos mejores que eso en este mundo, yo me siento en pañales todavía), y no saben que ya tengo 8 años de mi vida trabajando (desde los 18) y he tenido hasta que endeudarme para poder comprar lo poco que tengo.
En una oportunidad me robaron un stand de guitarra y unos cables fender que presté a unos chamines para que tocaran. Lo triste es que la envidia le duele más al que la siente que a la victima.
Pero eso es así en todas partes, no sólo en la música. Como auditor me ha tocado vivirlo a cada rato cuando me toca explicarle a gente que gana el triple que yo (y que podría ser mi padre), que se ha equivocado en un procedimiento. No es que yo sepa más que él , por algo él ocupa ese lugar, pero nadie se las sabe todas más una.
Pero es como aquí en hispasonic, a pesar de la diversidad de niveles de conocimientos, todos aprendemos de todos. Y eso es lo bonito.
La arrogancia, la envidia, realmente perjudica a quién la siente. Está en el autoestima del otro, no dejarse afectar por esos sentimientos tan vagos.
En cambio, el que sabe y comparte, está tomando el camino exacto para la inmortalidad.
Saludos