Con una foto un pelín más afortunada en la que jodiese algo menos el astro rey y pudiera leerse un pijo la serigrafia, aún tendiendo que ponerme las gafas, igual podría decirte algo más.
Logan era una marca bastante reputada cuando peleaba contra Bontempi, Elka, Farfisa (sobre todo), Crumar, etc.
Nada que ver con el "Solina" (éste lo tuve) que era americano, de la casa ARP y, digan lo que digan, sonaba como el culo y pesaba un huevo y medio. (Que se lo pregunten a un pipa al que le cayó el String ensemble en el pié y casi le amputa el dedo gordo. Por supuesto, el trasto salió imperturbable del incidente y aquella noche hasta sonó algo mejor. El montador, no. Se pasó un mes diciendo los tacos más espeluznantes que he oído jamás cada vez que veía a lo lejos la caja del Solasesina).
Luego, todas esas marcas tuvieron que fusionarse o desaparecer cuando los japoneses, sobre todo Yamaha y Casio, empezaron a llenar los hogares de juguetitos musicales y desde USA, Hammond y Lowrey invadian los salones comedores de órganos electrónicos con pedaleras de bajos y rudimentarios ritmos de batería (por llamarle de alguna forma -recuerdo que los platos y charles sonaban "doiiiiiingggg" como un muelle que se suelta) y que dichos órganos dieron lugar al nacimiento del moderno hombre orquesta.
Los italianos, estaban por delante en diseño y SIEMPRE, incluso, hoy en día, han sacrificado el diseño más enfocado al profesional que los 4 grandes japoneses, siempre haciendo vergonzosas concesiones al gigantesco mercado doméstico USA / Japón /Alemania.
El mismísimo Rick Wakeman hasta hace muy, muy pocos años utilizaba en directo un teclado GEM, italiano, por supuesto, y primo hermano de todos los mencionados, que era el corazón, el centro neurálgico de todo su habitual set de no menos de 8 ó 9 teclados, incluidos los últimos diseños Roland, Korg y reverenciados ancestros como el Mini Moog, pero el control general siempre desde su Gem Promega.
Esto otro no puedo firmarlo, pero he oído muchas veces que hace varias décadas, Vangelis encargaba la construcción de sus monstruosos engendros controladores Diy antemidi, anteinformaticos y antediluvianos (ver video
https://youtu.be/UOWB7KWS9CA) a los diseñadores italianos de las marcas mencionadas, que solían ser los mismos collares en diferentes perros (sic).
Resumiendo, si puedes, haz una foto mejor, pero sobre todo, lleva el teclado a un técnico a que compruebe su funcionamiento. En esa época no había ni chips ni chops en las tripas de esos trastos, por lo que las averías suelen ser de un par de condensadores, algun transistor o cables deteriorados. En total 10 €. Encontrar a un técnico electrónico DE VERDAD ya es otro cantar y otro pagar.
Pero si tienes paciencia y te manejas bien en mercados en redes sociales, puedes sacarle a esto 600 o 700 dólares en USA o Japón. También en Alemania o, muy especialmente en Holanda, donde donde creo que aún sobrevive alguna colonia de decrépitos druidas analógicos encerrados en mundos oscuros y prohibidos para nenes adoradores de bits.