Los reguladores que hace Botti, esos decrescendo a niente, son virtuosismo puro al servicio de la expresividad, parece que el tío tiene un fader en los morros. Yo he trasteado un poco con una trompeta y ni me imagino la sensibilidad y el control fino que hay que tener para sonar así, me parece más complicado que los sobreagudos de los salseros. Vaya sonido le saca al trasto.
Y Yo-yo Ma lo mismo. Control exquisito de timbre, dinámica y afinación. Par de extraterrestes.
Casi que el chino me pone más palote.
A los que venimos de tierras joteras nos motivan; pero sí, menos cansino, sobre todo para ellos...
Qué suerte ser hijo de este compositor.
Claro. Es que el suyo es un estilo inconfundible. Se sabe absolutamente cuando una pieza es suya, Tiene una forma muy característica de abordar los temas. Mal mirado se podría decir que es incluso repetitivo y muy insistente en las mismas cadencias. Por eso yo creo que todos los temas de "Cinema Paradiso" son indiscutiblemente suyos.