EdWood escribió:
Alguien escribió:
No todos los músicos son artistas.Ni todos los pintores,ni actores,etc.
No hablo de capacidad comercial ni nada por el estilo.
Creo en el talento como único nexo entre el arte,el artista y nuestras emociones y sentidos.
Pero me parece (más bien estoy convencido) que no todo el mundo tiene ésa capacidad.
Claro, pero... ¿quien decide si tienes esa capacidad o no?
Un pintor puede conectar conmigo y con otros no, para el que le llegue su mensaje ese tio será la hostia y para el que no lo entienda o no le guste pues ni fú ni fá.
Todo este tema es muy subjetivo, y la culpa de tanta polémica (no aquí, sino a través de la historia) sobre si esto es arte o aquello lo es más la tienen los teóricos que en vez de atrapar y retener las emociones que pueda despertarles un cuadro, una escultura o una composición para enriquecerse a si mismos, prefieren exteriorizarlas para demostrar al resto del mundo que ellos también son capaces de crear algo.
Estos sujetos, teóricos varios que conforman una amplia bibliografía, son unos parásitos que se sirven del "arte" para poder publicar un libro, llegar a tener una opinión que repercuta o sentirse mejor con ellos mismos.
¿Os suena aquello de que los críticos son artistas frustrados?
Pues yo digo que los teóricos son prácticos frustrados.
Y me viene a la cabeza un libro que me tragué en mis años de estudiante: "El cine como arte" de Rudolf Arnheim. No está mal, la verdad, y tiene aspectos muy interesantes. Pero cuando terminé de leerelo (árdua tarea dada la complejidad del léxico empleado) una pregunta me rondaba la cabeza: ¿Si a este tio le gusta tanto el cine y sabe tanto que coño hace escribiendo?
Entiendo que Hitchcock escriba un libro sobre como tratar el suspense, o que Juanma Bajo Ullóa escriba sobre el uso de la luz, porque ha demostrado saber usarla en "La madre muerta" o "Alas de mariposa". Y os aseguro que si estais interesados en saber de cine os enriquecerán más estos dos libros (por poner un ejemplo) que cualquiera de teoría general cinematográfica de Arnheim, Kracauer o Aumont.
Obras son amores y no buenas razones.
Y si alguien me pregunta qué es el arte, solo sabría responderle una cosa: "Mira en tu interior y dime lo que ves"
Hay tantos dioses como hombres y tantos clavos como mártires.