Pequeño detalle OT: el otro día escuche a un tertuliano de la radio (ni idea de quien era, la verdad), que hablando de la reforma laboral decía que le parecía muy mal que todos los debates y opiniones sobre las relaciones laborales acabasen planteando las cosas como un debate de "vagos contra cabrones"
Y coño, me pareció que tenía más razón que un santo en eso.
No sé que nos pasa a los españoles (y eso que yo soy sólo medio hispánico, pero me incluyo con orgullo) que siempre queremos plantearlo todo en blancos y negros, y además con agresividad y pasión, como si todo fuera un partido de fútbol.
El caso de los estudiantes y los polis es más de lo mismo, ni los estudiantes son unos santos (ni probablemente fueran todos estudiantes), ni todos los policías unos cabrones. Hay millones de matices como han comentado Klausmaría, Suvur o Born, que en las noticias, tertulias, debates hispasónicos y no hispasónicos se pasan por alto sistemáticamente, para pasar al "vagos contra cabrones". Y las cosas nunca son tan sencillas.
Me parece fatal que la poli pegue a cuatro crías, pero también me parece fatal que los 4 gilipollas indocumentaos que también han salido por ahí se dediquen a montar movidas y aprovecharse de los demás manifestantes (como las crías, por ejemplo) que seguro que estaba allí de buena fe. Y en las manifestaciones donde se monta movida, siempre hay 4 gilipollas indocumentaos. En las manis donde no los hay, no se monta ninguna movida. Y por supuesto los antidisturbios no son hermanitas de la caridad, pero es que los seleccionan y adiestran así adrede, porque si 2500 tíos se desmandan en cualquier sitio, si se lo proponen queman la ciudad.
Pretender ver lo de Valencia como que unos críos de 12 años estaban haciendo una sentada pacífica en la puerta de su cole y los antidisturbios se han puesto a repartir hostias porque sí es un error, igual que es un error pensar que lo ocurrido es que un grupo de pseudo-estudiantes quasi-terrpristas querían quemar valencia y la poli lo ha impedido (las exageraciones se han incluido como efecto dramático, que nadie me salte al cuello). Parece que el mundo es en color mientras no hablemos de él, y que en cuanto empezamos a hablar o debatir se vuelve blanco y negro.
Entiendo que las teles y los periódicos tienen sus líneas editoriales, tienen que vender, tienen que dar espectáculo y titulares, y convertir todas las cosas en "A contra B" y por eso prefieren esos tipos de análisis "versus". Lo que me da pena es que todos en un momento u otro caigamos en esas cosas (algunos no salen de ahí), en los debates de "vagos contra cabrones" o en este caso "niños contra cabrones".
PD:
Born® escribió:
Pero son igual de divertidos.
Eso sí