Hola a todos:
se me había quedado en el tintero algún comentario sobre el proceso de aprendizaje del contrabajo, a traves de la experiencia de mi hija de 9 años. La verdad es que el instrumento es complicado de veras, no solo para moverlo y colocarlo, sino porque los inicios son altamente fustrantes, ya solo conseguir pasar el arco por las cuatro cuerdas con un sonido semi-decente es todo un triunfo... no digamo nada ya cuando hay que empezar a pisar cuerdas con la mano izquierda... sin embargo, si se mantiene la motivación con algunas canciones sencillas y demás los progresos son evidentes en poco tiempo.
Nosotros hemos tenido suerte con el profesor, un "rara avis" en este mundo de los conservatorios con una mente muy abierta y, sobre todo, con un amor por su trabajo que hace que los niños, simplemente, le adoren... asi, da gusto ver su grupo de alumnos entre 8 y 18 años apiñados alrededor de él y realmente encantados. Seguro que muchos no llegaran al final, pero os aseguro que los crios disfrutan y aprovechan el proceso.
Para que veais el talante, os cuento la ultima novedad. La cria, ya desde el año pasado, estaba trabajando de forma alternativa canciones clasicas (con arco frotado) y algunos pequeños acompañamientos más modernos (blues y jazz) tocados con "dedos". De momento eran partituras sacadas de midis, simplificadas para que, sonando bien, no fueran demasiado complicadas en cuanto a variaciones de ritmo y arreglos. Servian (y sirven) para romper un poco la monotonía de las escalas y el trabajo de arco. Bueno, pues como ha visto que a la cria le encantan estas cosas, en la ultima clase ha empezado a hablarle de los cifrados y de la construcción de lineas de "walking bass" sobre ellos. Básicamente, utilizar las notas de los acordes (tonica, tercera, quinta y septima) para ir "improvisando" acompañamientos. No os imaginais la ilusión que le ha hecho a la cria eso de "improvisar", de intentar tocar sin seguir a rajatabla la partitura... por supuesto, el tema es complicado para ella ahora, tiene que llevar en la cabeza la notas del acorde, procesarlas en su momento para llevar la mano izquierda a su sitio y estar atenta al ritmo y al cambio de acorde... pero el ejercicio es impresionante y el reto sin duda le anima...
La verdad es que ya se que el trabajo duro y monotono de los metodos tradicionales es necesario, pero a veces pequeñas cosas como esas cambian totalmente la mentalidad del trabajo... y desde luego, mi opinion es que los retos es lo que nos motiva y nos ayuda a mejorar...
perdon por el rollo, me gustaria oir comentarios sobre otros instrumentos y otros enfoques de formación..
un saludo