1. Mira qué tipo de alteraciones tiene la armadura y cuántas hay. En principio, con estos datos deberías saber (de memoria, digo) qué tonalidades utilizan esa armadura. En caso contrario, escribe la escala teniendo en cuenta las alteraciones que te muestra la armadura. Por ejemplo: C D E F G A Bb. A continuación, busca donde se encuentran los semitonos y deduce, según su posición, cuál es el primer grado de la escala: tanto si se trata de modo mayor como si se trata de modo menor.
2. De este modo, tienes dos tonalidades candidatas:
- Una mayor
- Su relativa menor
3. Fíjate cómo se mueven las notas y la armonía. Fíjate hacia qué nota o acorde tienden. Esto te dirá cuál es la tónica y podrás discernir cuál de las tonalidades candidatas es la del fragmento.