#374 Yo no digo que haya que aceptar todas las vacunas, pero en el caso de la difteria es una vacuna contrastada a lo largo de décadas, . En el caso de lo de la gripe A, coincido contigo en que la gestión pudo ser más que discutible (creo recordar que el "negocio bueno" se hizo con la compra del tamiflú, para tratar una vez infectado, no con la vacuna). Y está claro que todo la mierda que hubo alrededor de la gestión de ese asunto ha dado alas a muchas teorías acerca de las farmacéuticas.
Vuelves a lo mismo de los mundos de yupi, tú has descubierto la verdad porque tienes acceso a la información y yo soy un pobre crédulo porque prefiero que la interpretación de una información muy especializada me la de un experto en ese campo (o a ser posible varios de ellos).
No sé, entre lo que me diga mi médico y el del herbolario, tiendo a creer a mi médico. Puede que este sea un mal profesional (que los hay en todos los ámbitos), pero entonces, le pregunto a otro médico y contrasto, no le pregunto al vecino, o al mecánico sobre vacunas. Simplemente defiendo que en determinados asuntos, algunos tan sensibles como la salud pública de una sociedad, la opinion de los profesionales debería ser la referencia. Porque en un plano más general creo que, aparte del acceso a la información, es vital la fuente y la persona que interpreta esa información y discrimina su relevancia en función de su formación. Y por mucho que queramos no todas las opiniones son iguales. O dejarías que te escayolara el peluquero.
Pero vayamos a un supuesto práctico. Imagina que yo, director de un colegio, tengo a varios chavales sin vacunar por decisión paterna, y tengo otro par de críos que no se pueden vacunar porque son inmunodeficientes, recien trasplantados o en tratamiento por cáncer. ¿No sé qué harias tú en el caso de que los padres de los chavales inmunodeficientes exigieran que los otros chicos o se vacunaran o se cambiaran de centro? ¿Y los otros se amparan en su derecho a no vacunar?
Yo, que soy créduloy según tú, vivo en los mundos de yupi escondiéndome ingénuamente con Don Pimpón tras los pinos de la verdad oficial, remitiría el caso a las autoridade sanitarias para que evaluaran la situación y tomaran una decisión basada en los estándares médicos y legales. A lo mejor, los que ya han hecho la fuga de Logan preferirían organizar una sesión de video forum para la asocición de padres y que entre todos los padres tomaran la decisión. Te aseguro que si yo fuera el padre de los niños inmunodeficientes y estuviera en riesgo su vida, preferiría que la decisión la tomaran los técnicos correspondientes, y no entre Luis el carnicero, Jesús el informático, o Marta la profesora de historia de arte, en función de lo que hayan o no hayan podido buscar en google (o en una biblioteca, para el caso). Si eso me convierte en alguien que vive en los mundos de yupi, pues nada...agacharé la cerviz y balaré un rato
Y para terminar y no repetirme simplente diré que si cuando solo había radio de transistores orejeras erámos un país con treinta millones de entrenadores, ahora que existe el interné como no no vamos a ser cuarenta millones de médicos, bioquímicos, virólogos...