Al menos desde tiempos de Mozart existe un pensamiento racional, no demostrado por la pedagogía ni por la sicología, ni siquiera por la estadística; según el cual la exposición temprana a cosas de adultos hace a los niños más inteligentes. Se basa en un principio, tampoco demostrado, en el que el aprendizaje es siempre progresivo o en
crescendo o simplemente logarítmico. Mozart, el pequeño, desarrolló altas capacidades solo en música, pero no ocurrió lo mismo con su hermana que fue una músico de alta calidad pero no alcanzó esa genialidad. Por contra Beethoven fue forzado por su padre a ser Mozart y fue un músico mediocre, poco motivado y desordenado, hasta que de adulto comenzó a cambiar el chip y decidió ser el mejor pianísta y el mejor compositor.
Más de de sobre-exposición la cosa va de motivación y encontrar el momento justo.
La primera prueba de que eso no es cierto es que muchos aprendemos pronto a andar de niños, y eso no provoca que andemos mejor de adultos, ni tampoco que lleguemos a ser atletas olímpicos. Ocurre lo mismo con el habla. No hay una correlación entre los niños que comienzan a hablar temprano con adultos que son mejores oradores o tienen un discurso más inteligente. Y es que hablar es mucho más que decir palabras.
Si de verdad interesa el tema
recomiendo la lectura pausada de este artículo más relacionado con las matemáticas pero que muestra como primer ejemplo el absurdo que a veces se comete con la educación musical:
https://brucknerite.net/wp-content/uploads/2015/04/lamento_matematico_lockhart.pdf
Con el ejemplo citado del hijo de Beato o con el famosísimo Collier me pasan cosas similares. Son
gente hiperestimulada que percibe la música como algo complejo, a lo que han sido forzados y que se alimentan de una complejidad no natural en la comunicación El interés es más intelectual que artístico. Es como si a alguien al que estimulan a hablar solo es capaz de hacerlo con palabras complicadas o discursos forzados y poco naturales. La primera vez que escuché a Collier hablar de música pensé que el tío sería un gran músico y busqué su música. Todo está hipersaturado de sintetizador más efectos vocales y no he encontrado una simple balada expresiva al piano con musicalidad comparable a un Keith Jarrett por ejemplo. La gente le adora cuando habla de teoría y explica cosas asumidas de los libros que ha leído, pero ¿cuántos escuchan a diario su música? Parte del mundo de los aficionados a la música supone que "si es capaz de hacer esto con 24 años, cuando tenga 30..." Esperaremos a ver. Yo lamento decir que nada de lo que he escuchado hasta ahora de Collier me resulta interesante como contraste tímbrico, dinámico o expresivo. Interesante la complejidad armónica, pero que no lleva a nada en concreto.
Volviendo a los experimentos de sobreexposición a niños. Al menos desde Mozart se lleva aplicando esa idea racional que supone que la exposición temprana e incluso forzar al niño a hacer cosas que corresponden a personas de mayor edad, hará un adulto con más capacidad. Solo por estadística es fácil demostrar esta falacia. Especialmente desde mediados del siglo XX algunos sistemas pedagógicos, como el Suzuki, se han empeñado en esto. Decenas y cientos de niños de 4 o 5 años tocando conciertos para violín de Vivaldi ¿Cuántos de ellos están ahora en una carrera profesional de prestigio? En países como China o Corea se aplican estos sistemas a millones de niños desde hace más de medio siglo. En los años 80 se decía que antes del año 2000 todos los músicos de las orquestas serían chinos. Hay algunos, pero no parece que tantos como se suponía, y la mayoría los que escaparon de un sistema industrial de formación musical.
https://www.eldiariomontanes.es/20091026/sociedad/destacados/fraude-baby-einstein-20091026.html
Cuando alguien publicita este tipo de sistemas y los vende como buenos, siempre destaca que uno o dos niños demuestran capacidades especiales para la música o que tienen un oído prodigioso. Como docente cada año encuentro que en torno a un 10% de alumnos tienen esa cualidad que se conoce como "oído absoluto". Esa cualidad, como la flexibilidad, la fuerza, la altura, etc., son simplemente casualidades de la genética y no tienen que ver con el entrenamiento. Evidentemente si una persona con oído absoluto nace en una familia que odia la música o que no tiene ningún contacto con ella, nadie la valorará ni la descubrirá. Si cogemos a todos los niños que tenemos cerca y los ponemos a aprender música encontraremos a los que tienen oído absoluto y ellos siempre harán los mejores dictados. Es lo que ocurre cada día. Para algunas personas basta escuchar una sola vez un fragmento musical y ya lo tienen en la cabeza. Sin embargo, muchos de ellos tienen dificultades para la escritura, asociar lo que identifican con la representación gráfica, y necesitan un tiempo similar al resto para conseguir representar los sonidos en el papel.
Hay muchas experiencias a lo largo de la historia en las que padres han experimentado con la exposición extrema a los hijos y no ha dado resultados esperados. El compositor alemán Stockhausen decidió exponer a sus hijos a la escucha continuada de música contemporánea experimental tratando de demostrar que si se escucha esta música desde niños, se adorará, se comprenderá, y se odiará a Vivaldi como un gran disonante. La experiencia no dio los resultados esperados.
La cuestión relativa a la música, a la lectura o al habla, es que son medios para una comunicación y es más importante la comprensión que la identificación o la producción. A mi me asombra que una persona que es capaz de tanta precisión en la percepción sonora, no la tenga para maravillarse del sonido y de la relación entre los mismos, de las funciones armónicas. Todo es extrema complejidad. Personalmente los vídeos de Beato me resultan demasiado soporíferos, siempre enredado en la complejidad o en intentar simplificar cuestiones de estilo. Parte de un principio en el que la música más compleja es mejor o en el que identificar un acorde que solo encontrarás en una obra de Stockhausen es más importante que sentir la tensión de una dominante secundaria en la música de Police.
Retomando el argumento estadístico, a pesar de siglos de experimentación, no hay correlacción entre la sobreestimulación temprana y las altas capacidades ni en la niñez, ni en el mundo adulto. Más bien al contrario, la exposición antes de alcanzar la madurez es perjudicial creando problemas de aprendizaje y de tensión que sí ocasionan graves trabas al niño y adulto. Esa presión por aprender a ser mayor viene a ser como enseñar a un niño de 3 años a invertir en bolsa, o a levantar pesos para cargar camiones. Todo tiene su tiempo y su momento, diferente en cada persona y para esto están los profesores que deben comunicarse con el alumno y detectar cuándo es el momento adecuado de cada persona para avanzar en el aprendizaje.
De hecho los sistemas educativos derivados de la Revolución Industrial se basan en el principio racional de que todas las personas de la mismas edad, incluso las nacidas en el mismo año (a pesar de que los nacidos en enero y los nacidos en diciembre se llevan casi un año) deben llegar al mismo tiempo, en el mismo minuto y en el mismo segundo a los mismos objetivos de aprendizaje. Es un error que estamos padeciendo y padecen los alumnos medidos con estándares industriales de calidad de producto.
Si Beato ha encontrado la piedra filosofal para producir Bach's en cadena mediante el método Beato Einstein (ver la información sobre el sistema de estimulación temprana americano Baby Einstein), en la actualidad debería haber unos 30 o 40 "Baby Bach" haciendo fugas barrocas con una mano, mientras con la otra improvisan Rhythm Changes en dos tonalidades a la vez. Dejando ironías, aparte de su hijo, ¿quién más demuestra cualidades excepcionales sometido al método Beato?
Dicen que es importante conocer la historia para evitar volver a cometer los mismos errores. No conozco la formación pedagógica (no me refiero a la parte musical) de Rick Beato, pero me gustaría saber qué sabe de sicología, de la evolución del pensamiento en el niño, o de técnicas para superar las dificultades de aprendizaje. Cualquiera que sabe sobre algo se siente autorizado a ser profesor ya que se piensa que un profesor es alguien que transmite conocimiento, pero un profesor es alguien que enseña y enseña a aprender, que se comunica con el alumno y busca la manera y el momento para llegar al objetivo buscado.
El mundo actual necesita menos información y más pedagogía.