¡Uf, que disyuntiva!
Yo me quedo con todo y además depende de mi estado de ánimo para oir o hacer una u otra cosa.
Hombre, hay veces que necesito adaptar lo máximo posible la música a la idea porque esta última sea muy consistente y utilizo los recursos que crea apropiados.
Uno de mis compositores favoritos es Debussy con el que llego a imaginar cualquier cosa que él me invoque. Y ahí hay un punto de inflexión, es decir, cómo el compositor pretende inducir ciertas ideas descriptivas mediante el título/explicación. Es un ejemplo extremo porque Debussy tenía lo que tenísa (que no era poco) probablemente hoy en día utilizaría otros instrumentos.
Las bandas sonoras son muy descriptivas, pero la explicación suele ir antes, es dificil que el oyente conecte con la intención del compositor sin previas pistas. Hay excepciones, claro ya están los condicionantes con los que hemos crecido; por ejemplo, la música de ciencia ficción de los años cincuenta en la que era muy habitual encontrar el sonido de un theremin. Ahora, si oímos ese instrumento, nos recuerda a una película de ciencia ficción, pero ¿porqué? ¿Acaso es así como suenan las naves espaciales en el espacio? No lo creo, se trata de una asociación basada en un condicionante.
Parecera un poco "offtopic", pero el hecho de poder acceder a los instrumentos y a la tecnología que uno desea, condiciona mucho el tipo de música que se pretende hacer y cómo. Las nuevas tecnologías vienen fenomenal para acceder a nuevas texturas, timbres, emulaciones, etc y eso implica una mayor probabilidad de expresar musicalmente las ideas que a uno le pasan por la cabecita. Claro que esas ideas al final, están muy condicionadas por otros parámetros. No obstante es imprescindible la imaginación.
Lo que sí apoyo es la libertad musical, la necesidad imperiosa de que una gran mayoría de músicos y oyentes comprendan que la música no es lo que el mercado quiere hacernos creer, sino que necesita salir de estrechos rangos que provocan que lo más natural se convierta en algo extraño, por temor a nuevos ritmos, timbres, compases, etc (y por supuesto y como primera premisa, a perder dinero).
Tengo claro que hay que disfrutar de las "herramientas" que la tecnología nos brinda y que puede condicionar nuestra visión de la música. Sin miedo.
Hagamos lo que hagamos, que sea honesto. El que tenga que vivir de esto...lo siento
Un saludo.