4. No hago huelga porque no estoy de acuerdo con los sindicatos.
La huelga no es a favor o en contra de los sindicatos, asociaciones de padres, madres y alumnos, asambleas y plataformas de profesores, vecinos y ciudadanos ni partidos políticos que la convocan y/o apoyan. La huelga es contra los salvajes recortes en la Educación Pública, una reducción del presupuesto de más de 3.000 millones de euros que supondrá una masificación de las aulas, el despido masivo de profesores y por tanto un grave deterioro de la calidad de la enseñanza y de las condiciones laborales del profesorado. Además, la subida de las tasas universitarias y el encarecimiento astronómico de los másteres limitará las posibilidades de acceso a la educación superior de los alumnos cuyas familias no dispongan de recursos económicos suficientes. No olvidemos que los recortes incluyen una drástica reducción de las becas universitarias y de las ayudas a la compra de libros o comedor escolar en el resto de etapas. Pero yo no secundo la huelga para expresar mi desacuerdo con los sindicatos aunque ello suponga dar mi respaldo tácito a las medidas gubernamentales que perjudican gravemente tanto a mis alumnos como a mis compañeros y a mí mismo. "
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La huelga no es a favor o en contra de los sindicatos, asociaciones de padres, madres y alumnos, asambleas y plataformas de profesores, vecinos y ciudadanos ni partidos políticos que la convocan y/o apoyan. La huelga es contra los salvajes recortes en la Educación Pública, una reducción del presupuesto de más de 3.000 millones de euros que supondrá una masificación de las aulas, el despido masivo de profesores y por tanto un grave deterioro de la calidad de la enseñanza y de las condiciones laborales del profesorado. Además, la subida de las tasas universitarias y el encarecimiento astronómico de los másteres limitará las posibilidades de acceso a la educación superior de los alumnos cuyas familias no dispongan de recursos económicos suficientes. No olvidemos que los recortes incluyen una drástica reducción de las becas universitarias y de las ayudas a la compra de libros o comedor escolar en el resto de etapas. Pero yo no secundo la huelga para expresar mi desacuerdo con los sindicatos aunque ello suponga dar mi respaldo tácito a las medidas gubernamentales que perjudican gravemente tanto a mis alumnos como a mis compañeros y a mí mismo. "