Señor Lordaris, agradezco, sobre todo, su interés en la lengua comun que inventamos los riojanos
y que, casi siempre, nos une con una comunidad tan extensa y tan diversa desde el punto de vista antropológico (que también es cierto, en Méjico fue ampliamente diseminada por los míos y los de justo al lado, que son de comparable picha expansiva).
Compartiendo idioma, la misma condición de usuarios de esta Web, algún que otro gen, y, lo más importante, que ya hemos intercambiado más de un diálogo escrito aquí en
Hispa, haz el
rechingado favor de hablarme de tú, capullo.
Por otro lado y contestando a esa queja tuya del sistema educativo mejicano; Méjico, actualmente un país, por lo que se (que es algo) en medio de una profunda crisis, ha sido para mí uno de los modelos incluso a oponer a los usos,o más bien desusos) idiomáticos peninsulares (uso peninsular de forma intencional, como si me dirigiese a un canario ). Méjico (que voostros, usando el arcaísnmo fonético y como rasgo dfe independencia panchovillista, escribís y decís
México), que ha dado a Carlos Fuentes, a Octavio Paz, a Juan Rulfo, y muchas editoriales, que ha tenido una universidad de corte occidental; pero con un marcado carácter social en los aos 60, 70 y 80; ¿qué ha pasado en Méjico?. Pregúntales a los gobernates corruptos (otra herencia de
Ex-paña; pero acrecentada con el virreinato, la inpunidad de la distancia y el independentismo criollo). O pregunta a los que practican y ejercen la doble moral del otro Estados Unidos, el de arriba (que pocos aquí saben que tu país es , para empeza,r Norteamérica, y, para seguir, Estados Unidos, de México); esa doble moral que hace deportar a inmigrantes ilegales; pero que, pese al acuerdo de libre Comercio con USA y Canadá, permite que haya una entrada , quizás necesaria aunque inconfesada, de droga desde el vecino pobre.
No siempre fue así en Méjico, tampoco en Argentina, ni en Colombia, ni en Perú, ¿quieres que empiece acitar las conquistas literarias o culturales de los otros tres países que acabo de citar?.
Pero ese independentismo, criollo primero; luego revolucionario, esa falta de autoridad desdeñosa de La madre Patria (contepto real por los pelos y en nada comparable con una
Commonwealth, y vuestra cercanía demasiado evidente de vecino pobre de U.S.A. os ha perjudicado: sirve en bandeja un colonialismo lingüistico desproporcionado y, entre defenderse de los matones y de la pobreza y hablar bien, es lógico que se elija seguir viviendo aunque sea en
Spanglish.
Poned en jaque a los malos, recuperda el aliento, volveda ese espíritu plausible que había en el P.R.I y volved a paracticar un Español de Méjico que haga sentir envidia en este lado del charco.
Aquí, en
Ex-paña, tampoco son buenos tiempos para el Español; ni tampoco para los españoles.