Hola Daniel, ambos tienen razón, dependiendo de si lo que tocas lo haces
1) manteniendo la misma postura con la mano (subes de tono, a razon de semitono por traste) o bien
2) adaptas tus posturas con objeto de mantener la tonalidad previa.
Te pongo un ejemplo con la primera frase de la archiconocida
estrofa de Oasis "Wonderwall", que hace:
Em - G - D - A7sus4
Si pusieras el capo en el tercer traste, y haces exactamente las posturas para esos mismos acordes, es evidente que subes la tonalidad, aunque la musicalidad se mantiene. Es decir solo tendrías que cantar más agudo, y sonarían realmente:
Gm - Bb - F - C7sus4
Para ti es indiferente, tu sigues colocando las manos igual que antes, solo que la cejilla te ha ayudado a subir el tono.
Ahora bien, muchas veces quieres grabar dos guitarras con sonoridades/armónicos muy diferentes pero que estén en la misma tonalidad. Imagínate que ya tienes una linea tocando lo de arriba en Em. Pues ahora pones la cejilla en 3 como antes, pero ahora vas a tocar, respecto de esta referencia de cejilla en 3:
C#m - E - B - F#7sus4
Es decir, estás tocando tres trastes más arriba, pero has adaptado tus acordes para mantener la tonalidad previa de Em. (Tocas en C#m y como estás 3 semitonos más alto, pues suena en realidad Em). Con ello consigues aportar un timbre diferente, armónicos muy diferentes, y combinada con la guitarra sin cejilla, una sonoridad conjunta muy rica.
Espero haber ayudado.
Un saludo
Víctor