Yo voy a exponer mi opinión, que seguro que la tacháis de machista, pero es que no es por nada, pero creo que estoy bastante en lo cierto...
Ya en el instituto, a un profesor de filosofía, le discutí que el hombre, antes que hombre, es animal. Esto es, hay una serie de instintos básicos que salen a flote en situaciones críticas; si bien tenemos la capacidad de reprimirlos, no siempre es así. Uno de ellos es el instinto de perpetuación de la especie... Pues bien, os preguntaréis qué tienen que ver los cojones pa comer trigo, pero hay mucha relación entre la perpetuación de la especie y las actividades que un hombre o una mujer desarrolla. Como siempre, existen las excepciones, afortunadamente cada vez más, y esto es porque la mentalidad cambia, el factor cultural que complementa al factor instintivo, cambia.
La mujer, por naturaleza, debe atraer al hombre, y eligirá al que haga una mayor demostración de fuerza. Es por ello que la mujer para llamar la atención se pone atractiva, y el hombre llama la atención realizando actos sin conocimiento, como por ejemplo, en los adolescentes, el típico idiota haciendo caballitos con la moto, las apuestas de que quien salta la portería de futbol con la moto, que si adelanto de un tirón a mil millones de coches por la derecha o por la acera en la Avenida no sé cuantos... todo por llamar la atención de la mujer y que ella advierta que ese es su hombre: fuerte, valiente, atrevido, "tirao palante"...
Claro, hay una serie de actividades laborales que nos ayudan a destacar estos rudimentos de la perpetuación de la especie que llevamos en lo más profundo de nuestro cerebro. Y hay actividades que las perjudican. Así, en la mujer, toda aquella actividad que suponga sudor, no tener una presencia atractiva, esfuerzo físico... es desechada. La mujer es hedonista respecto al esfuerzo físico y mental (hablo en general). En el hombre, pasa lo mismo, se desecha aquello que se ve como "muy femenino".
¡Pero! A todo este factor fisiólogico hay que añadir el factor cultural, mucho más importante todavía, ya que lo anterior son solo eso, rudimentos. Ese factor cultural que dice que los trabajos delicados los tienen que hacer mujeres, y los pesados, hombres. Un factor cultural que como su nombre indica, varía según culturas (razas, épocas, civilizaciones...).
¿Qué nos encontramos actualmente? Pues que prevalece el factor fisiólogico todavía, incluso en algunos aspectos se ha visto fortalecido: hay más secretarias que secretarios, hay más azafatas que azafatos, más chicas esteticistas que hombres... Y en las carreras técnicas hay menor presencia femenina porque aunque parezca mentira, el estudio de asignaturas de ciencias es activo, mientras que el estudio de asignaturas de letras es pasivo. Esto es, y como he estudiado ambas cosas sé lo que me digo, una asignatura de letras entra con leer varias veces, y en las carreras técnicas muchas veces toca razonar, plantear, replantear, borrar, tachar, volver a empezar... vamos, el esfuerzo mental es más activo, tanto, que no sé si habréis observado que cuando algo no sale y se complica la cosa la temperatura corporal sube e incluso se duda. También el mundo laboral de una carrera técnica es menos apropiado para mantener ese aspecto atractivo (comentado antes, necesario para la perpetuación): pisar barro, llevar mono en montes, agricolas, agronomos... Llevar cascos (que chafan el peinado) y enredos por aquí y por allá que no te permiten llevar un modelito (en comunicaciones, producción audio-visual)... Sin embargo tienen más éxito Derecho, ADEs, Empresariales... un mundo más volcado en las relaciones sociales (ya estamos con el instinto de perpetuación). Las carreras técnicas con más éxito son, ¡qué curiosidad!, las relacionadas con Tecnología de Alimentos (la dieta, conservar la línea).
Todo esto os puede parecer una chorrada, estoy seguro de ello, pero... ¡¡no no no no lo es!!
Si extrapolamos todo esto a la música (y siempre hablando en general), tenemos que: hay más chicas que tocan cuerda (violín, viola, cello)... contrabajo, ya no (pesa). Las chicas que tocan viento en su mayoría eligen flauta (mucho menos esfuerzo que un oboe, clarinete o fagot). Hay poquitas percusionistas. Y chicas que toquen instrumentos de metal, también muy pocas, ¡y aun no he visto una chica que toque una tuba! Siguiendo con el factor fisiológico, es curioso que las chicas que tocan instrumentos "más delicados" suelen ser más atractivas que las que tocan instrumentos más "brutos", como un trombón (aunque como digo, siempre hay excepciones, por fortuna, y gracias a eso conozco a una chica que toca trompa y es una auténtico modelo de pasarela
).
En relación a la música electrónica, si nos paramos a pensar... ¿con qué se trabaja en música electrónica? Con máquinas... A bote pronto la impresión que nos causa la palabra "máquina" en la cabeza es la de un aparato ruidoso, sucio (grasa, polvo), pesado... algo en contra de la belleza de la mujer atractiva que tiene que atraer a su pareja para perpetuar la especie. Así de chorra parece, pero no lo es tanto.
Como he dicho antes, los factores culturales casi siempre realzan y potencian esos factores fisiológicos, pero no son tampoco determinantes. Afortunadamente la cosa está cambiando. Pero digo que no son determinantes porque yo tuve mi primer ordenador con 19 años (tengo 25 de hace 3 meses casi), y ya de antes me gustaba la electrónica musical, pero lo veía todo muy lejano, muy caro, fuera de mis posibilidades.
Para acabar, no solo a las chicas "electrónicas" se les mira como raras. También a los chicos, aunque en menor medida, y no me digáis a los informáticos, que siempre se les dice que son raros. Y es la mujer (y es que lo he comprobado en mis propias carnes) la más presente en esas críticas, tanto hacia hombres como hacia mujeres. De hecho, en hombres jóvenes, de una edad similar a la mia, no he encontrado a ninguno que tache de rara a una chica que le guste la informática o la electrónica musical... todo lo contrario, estamos encantadísimos. Sin embargo hay más mujeres críticas, y es muy común todavía el comentario: "Es guapo, pero no sé... es informático", y todavía no ha cruzado con él palabra y no sabe cómo es, pero por ser informático ya es... raro.