Emilio Galsán escribió:
Para que se dé baja autoestima y egotismo tiene que existir una fuerte consciencia-presencia del sí-mismo. Los niños pequeños no son egocéntricos ( sino más bien ex-céntricos porque no distinguen mucho entre el yo y la cosa-mundo).
Si, por eso pienso que lo que relatas no es necesariamente baja autoestima, mas bien suele ocurrir que del paso de la niñez a la adultez ciertas partes de nuestra personalidad se desarrollan a ritmos distintos y puede ser que se conserve esa incapacidad de tienen los niños de percibirse, eso potenciado claro por un mundo adulto que no toma en consideración el yo del pequeño, no deja que lo desarrolle.
danivicen escribió:
Pero vamos a ver Harpo, si estamos hablando de que la sociedad, el entorno y la cultura influyen en los gustos, ¿por qué dices ahora que simplemente te gusta o no te gusta? Es que te contradices tú solo.
Las contradicciones a ojos ajenos son siempre incapacidad de comprender.
Es simple Dani, imaginemos que tu trabajo es abrir puertas. Aprendiste que metes la llave, giras y la puerta se abre. Felicitaciones, has aprendido a abrir puertas, pero un día te entra la curiosidad por saber que es lo que ocurre dentro de la cerradura. Supongamos que lo estudias, averiguas el mecanismo mediante el cual el introducir una llave en un agujerito te puede permitir abrir una puerta, pero resulta que para que se abriera la puerta no era necesario saber que generaba su apertura, bastaba con introducir la llave y girar.
Sin conocer lo que ocurría dentro de la cerradura la puerta se habría de todas formas, conociéndolo se sigue abriendo, en conclusión el conocimiento o tu inquietud respecto son irrelevantes en la acción de abrir la puerta.
Lo mismo, el mecanismo mediante el cual ocurre el gusto no necesita ser comprendido para que se desencadene el gusto, y comprenderlo tampoco hará cambiar dicho mecanismo.
Si tu piensas cambiarlo en ti mismo, pues dale, nos cuentas como te va, ahora si lo que piensas es que lo puedes cambiar en el resto, bueno, a eso se le llama pensamiento mágico.