seguimos filosofeando a caballo con la audición y la definición de qué es correcto o no... He estado buscando, ach, no lo he encontrado, una cita que daba la apertura a una convención de audiófilos de los años 50 en la cual, creo recordar, se leía algo parecido a ésto: - es inimaginable la cota de desarrollo que la industria dedicada al sonido ha llegado y cuya perfección raya lo absoluto - (más o menos)...
¿A que parece una frase de ayer mismo?
Durante años los fabricantes de altavoces han pujado por ofrecer una respuesta, además de lo más plana posible, de lo más extendida... encontrar algún monitor que rayara los 30 Khz era un verdadero milagro... (y eso a base de trucos, ya sabéis, en apostilla y pequeñito rezando: -10 dBs... es decir, que llegaban, pero la pendiente de audición caía abruptamente..)
Ahora sacan de la chistera los nuevos conversores enfocados hacia el dvd audio de alta calidad y cuyo muestreo se extiende hasta los 192 Khz, en principio (aunque la industria, que tiene que comer de ésto, ya tiene previsto duplicar y cuadruplicar dichos valores, en un futuro a medio plazo...).
He ahí, que de nada sirven todos estos milagros si luego los transductores finales no alcanzan dichos valores... y entonces (voilá y milagro de Aladín), van Sony y un par más y te presentan unos altavoces que alcanzan los 100 Khz de respuesta...
Perdonad, que me sonroje al respecto...:
cuando hablamos de la respuesta humana entre los 20 Hz y 20 Khz, tenemos presente que las frecuencias agudas sólo serían perceptibles por un conjunto cóclea y demás componentes del oido humano, sólo en posesión en los niños, de tamaño reducido y en consonancia, por ende, con dichas frecuencias... Es decir, que cuando crecemos, aumenta el tamaño del oido y pierde esa capacidad de percepción, porque ya no es tan pequeño...
Otra mito: Pioneer en su día afirmó que la percepción de cristalinidad mayor o menor, en una grabación, dependía de la presencia o no de armónicos hiper agudos, capados, como sabéis, por el teorema de Nyquist... Así que se saca de la manga un sintetizador del ultra-armónicos y dota del mismo a sus reproductores de cd, afirmando que de esa forma los discos digitales suenan mejor en sus lectores que en los demás...
Realmente y si alguna vez hacéis un test de tonos puros con unos buenos monitores, veréis la limitación que tenemos para percibir dichos sonidos en los extremos del expectro:
en los graves veremos ondular el cono, muy espectacularmente, pero casi no percibiremos nada... en los agudos no veremos nada y entonces comprobaremos que, en efecto estamos inyectando en la mesa "esa" señal de 20 Khz, que los leds están que trinan, pero que no percibes nada...
Está claro que la industria te tiene que vender siempre lo más nuevo y moderno y que se da por supuesto que lo anterior es peor... Curiosamente si aplicamos exte axioma, lo que nos presentan ahora será lo peor de lo que nos presenten mañana...
Pero claro, cualquiera se pone a desmitificar lo digital, ya que éste, en un contexto puramente comercial, se autoexcluiría... Siempre me pueden decir que se ha democratizado el tema, que se ha mejorado sustancialmente...
Pero, lo que la propaganda omite es que, si el contexto análogo tenía emparejado multitud de problemas inherentes como el magnetismo, la remanencia, la coercitividad, etc... el mundo digital ha traido una cantidad, si no mayor de problemas, casi más gordos que el primero...
Pero eso te lo dicen muy muy bajito...
Ya que hablamos de jitter, por ejemplo, este ruido (¿ruido en lo digital? ¡anatema! ) se hace más presente en sobremuestreos más altos... por lo tanto más difícil se torna diseñar desacoples de alimentación óptimos o resincronizaciones externas Pll...
Además el jitter "se come" bits y éstos se quedarían cortos: un conversor de 20 funcionaría sólo a 16 y así sucesivamente, si no se logra someter al mismo...
salu2