Antes había una industria musical muy potenete que se dedicaba a promocionar ciertos grupos o artistas y nos los presentaban como los únicos buenos o con calidad. Vendían millones e invertían millones y nos bombardeaban con el producto.
Hoy mantienen el mismo modelo de negocio pero habiéndose reducido importantemente lo que ganan y lo que invierten, con lo que el producto de la industria musical ya no destaca tanto, y desde luego ya no vende ni una decima parte.
Por contra hay mucha más variedad de oferta, con lo que al usuario final ya no le llega el producto final filtrado, seleccionado. Dirigido.
Para muchos usuarios esto es un problema, pues les toca buscar y seleccionar la música que les gusta, con lo cual terminan con una sensación de navegar en un mar inmenso de grupos, canciones y artistas en el que nadie destaca y todo es mediocridar (entendida desde el punto de vista comercial).
Hoy es mucho menos negocio invertir en crear una estrella de la música, por eso te da la sensación de que los que se encuentran en el panorama actual no son igual de buenos que los de antes.
Comercialmente no tendrán tanta relevancia, ni tanta fama ni moverán tanta pasta.
Artísticamente el panorama actual es infinitamente más rico que hace 20 años, con sus pros y sus contras. Ya que el número de grupos que presentan su producto sin pasar por el filtrado o co trol de la industria es mucho mayor. Eso si, es el fin del negocio.
Hoy mantienen el mismo modelo de negocio pero habiéndose reducido importantemente lo que ganan y lo que invierten, con lo que el producto de la industria musical ya no destaca tanto, y desde luego ya no vende ni una decima parte.
Por contra hay mucha más variedad de oferta, con lo que al usuario final ya no le llega el producto final filtrado, seleccionado. Dirigido.
Para muchos usuarios esto es un problema, pues les toca buscar y seleccionar la música que les gusta, con lo cual terminan con una sensación de navegar en un mar inmenso de grupos, canciones y artistas en el que nadie destaca y todo es mediocridar (entendida desde el punto de vista comercial).
Hoy es mucho menos negocio invertir en crear una estrella de la música, por eso te da la sensación de que los que se encuentran en el panorama actual no son igual de buenos que los de antes.
Comercialmente no tendrán tanta relevancia, ni tanta fama ni moverán tanta pasta.
Artísticamente el panorama actual es infinitamente más rico que hace 20 años, con sus pros y sus contras. Ya que el número de grupos que presentan su producto sin pasar por el filtrado o co trol de la industria es mucho mayor. Eso si, es el fin del negocio.
