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Yo te supero, el primero fue el de 48 k. Ahí ya me llamó la atención poderosamente la rápida y "fácil" manera de hacer melodías con comando Beep y sus "muchas" variaciones.
Pero a partir de ahí fue una caso bastante clásico y que a muchos le sonarán. En mi caso un disco de Vangelis (Carros de fuego) que a mis padres le regalaron en el banco (!) y de cuya cara B me quedé fascinado (el de la suite, con sus efectos y su CS80 a saco).
Un amigo tenía el Casio PT20 y lo tocó delante mio y quedé fascinado con lo que se podía hacer entonces y como ya ahora más aún entonces que era un niño, culo veo culo quiero y pedí uno a mis padres.
Obviamente a medida que fuí aprendiendo, aquel enanito se me quedaba corto así que pedí un arranger (obviamente no lo llamé así, por entonces era un teclado) más completo. Pese a los desesperados intentos de mi familia de querer que aprendiera piano (me arrepiento bastante de no querer aunque el solfeo siempre lo odié....) y hasta un acordeón (!!)-eran tiempos de Maria Jesús y su acordeón-, yo me emperré y en el Corte Inglés me topé con una joya de la cual no puedo poner foto porque no me acuerdo del nombre y era un PSR, de los cuales Yamaha hizo como un millón.
Pero aparte de tener sus ritmos, sus sonidos y su teclado mini pero ya de 49 teclas (guau), tenía dos características que se me quedaron marcadas para siempre. Una era cuatro sliders que modificaban los ritmos (pero MUCHO) con lo cual no tenía 16 ritmos fijos (más sus intros y finales) sinó lo que para mi eran un millón de ritmos diferentes. Otra eran seis sliders que modificaban los 16 sonidos que incorporaba (más sus efectos de "sustain" y "vibrato"). No lo supe entonces pero lo sé ahora. Aquello era un bebé FM en potencia. No es que modificaran un poquito las envolventes, la onda, el filtro y etc de cada sonido, es que "destrozaba" el sonido original y lo convertía en otro muy diferente. Seis sliders, seis, en un arranger para niños....aquello sí que era una GRAN estrategia de Yamaha para hacerme un "Inception" en toda regla de querer un sintetizador.
Digamos que del ritmo POP y del sonido PIANO acababa aquello siendo un sin dios tipo ritmo Karma y sonido DX.
Pero aunque el "Inception" de la síntesis ya estaba en mi inconsciente, la capacidad de tocar ritmos y canciones del momento-cosa que Yamaha sabía y sabe hacer a la perfección en la actualidad- me atrajo más. Así que el siguiente paso estaba claro. Un arranger con "cara y ojos". Con muchos ritmos y muchos sonidos. Curiosamente, el PSR-SQ16, que fue el elegido por mi, tenía eso. Y un secuenciador...de 16 pistas? La verdad es que no lo sé, recuerdo al dependiente de la tienda diciéndome "seguro que quieres éste? es muy complicado"..
Fue una pista de lo que me ocurriría muchas veces en el futuro, cagarla por querer ciertas características que en el fondo sabía que no podría dominar. No grabé nunca NADA en ése secuenciador. Y no lo recuerdo como un gran "modificador" de sonidos, pero claro, tenía muchísimos más que 16 y mucha variedad así que no lo eché en falta. Y tenía una característica CLAVE antes mencionada. Yamaha no es que se inspirara en canciones de los 80 y 90 para hacer sus styles, es que los copiaban directamente. Su "latin pop" era el famoso single de Gloria Estefan. Su (me lo invento porque no recuerdo los nombres exactos) "new age disco" era el Sadeness de Enigma...no,no parecido al..EXACTAMENTE el Sadeness de Enigma. Y creo recordar que había ritmos clavados de gente como F.R.David y demás. Así que me lo pasaba pipa.
Pero la "Inception" siguió ahí y como sabeis los que habeis visto la película, se convirtió en una obsesión, así que NECESITABA un creador de sonidos, un modificador de sonidos...un SINTETIZADOR.
Ya por entonces escogí por casualidad a Jarre y todos sus cassettes y después a Mike Oldfield y los suyos. Vangelis entraba y salía de mi vida, sobretodo a través de las sintonías de los programas de radio y las bandas sonoras de las películas.
Pero el "daño" ya estaba hecho.
Para no alargarme mucho más resumiré en que pedí un sintetizador, mi familia, de clase media en los 90 podía pagar un piso, un coche y hasta un sintetizador de 300 mil pesetas sin ser más que chofer de camión y secretaria (igualito que ahora), basado en mi historial académico y de educación perfecto (era un buen chico..si si, "era"
), dijeron que vale. Por entonces estudiaba Imagen y Sonido en Barcelona y a pocos minutos había una tienda de pianos, instrumentos ENORME en la que el sótano estaban TODOS los sintetizadores de finales de los 80 y de los 90. Todos los que recuerdo estaban allí pero dos inmediatamente llamaron mi atención. Uno por su exterior y otro por su interior.
Finalizo. Solo podía elegir entre uno de los dos y me fijé en el que tenía la belleza más en el interior, el Korg 01WFD...cuyo versión en módulo aún tengo y me flipa que 30 años después aún tenga más pegada y sonido cristalino que muchos de los otros sintes que tengo. El mismito Korg O1WFD que hace medio Chronologie de Jarre y resuena en todo el 1492 de Vangelis.
El que me entró por los ojos pero al final quedó "para otro día" (y aún me arrepiento de no habérmelo pillado después) fue el JD800 de Roland.
Definitivamente el 01 era más variado y versátil en cuanto a su paleta sonora, indudablemente el JD era mejor sintetizador y más para la música que me gustaba. Pero claro, era elegir entre mamá y papá.
Pero saqué mucho provecho del Korg y no me arrepiento tanto de la elección. Solo una frase final. Recuerdo ponerme los auriculares y tocar un pad del Korg después de 15 años tocando arrangers. No es una exageración, de verdad. Se me cayó la baba. Literalmente. Y a partir de entonces me tiraba 8 horas al día tocando. Ahí aprendí mucha síntesis.
PD: Y a partir de ahí y hasta hoy, creo que unos 50 y pico sintetizadores y cacharros similares han pasado por mi vida y me he quedado con más de 20 y pico. Y añoro muchísimos de los que vendí. Y siempre tendré la espinita clavada de no haber tenido la oportunidad (por dinero o por espacio) de tener el D50 y el JD800 en mi vida. Pero eso es culpa de Jarre y de otro foro y otra historia.