¿Cómo fue tu primera vez... con los sintetizadores?

La madre del topo escribió:

la habréis llevado en el repertorio

Claro,junto con las de Georgie Dann,Boney M,Richi e Poveri,Richard Clayderman,Felipe Campuzano,Mari Cruz Soriano...vaya cutre-orígenes.

Luego ya fueron versiones de Mecano,Video,Azul y Negro,Tino Casal y blablabla.

Lo que se tocaba por aquellos años en las verbenas modernas (1972):



GIORGIO SON OF MY FATHER

El tema interpretado por Chicory Tip era una obra de Giorgio Moroder y Peter Bellotte.

Pero a todos nos enganchó más ésto:


jean michel jarre - oxygene part 2 (1976)

O ésto:



Emerson, Lake & Palmer - Knife-Edge - 2nd version (1970)

DCS escribió:

Luego ya fueron versiones de Mecano,Video,Azul y Negro,Tino Casal y blablabla.

Justo en ese momento dejé los escenarios

La madre del topo escribió:

nos enganchó más ésto

A mí me tira más ésta a modo de intro :

Pero el otro fue anterior, estaba en todas las casas de recién casados cinco o diez años después y a fumar petas.

Alguien escribió:

#167 por La madre del topo hace 13 horas

Lo que se tocaba por aquellos años en las verbenas modernas (1972):

GIORGIO SON OF MY FATHER

Yo creo que fue el primer tema en el que fui consciente del uso de sintetizadores.

Muy probablemente lo fue para muchos.
Algunos curiosos o con açceso a cierta dosis de vanguardia podíamos haber recibido algún mensaje envenenado y tentador de este nuevo mundo, que, ojo, con esto de tocar sintetizador se pasaba a ser cómplice del futuro electrónico y robótico y uno albergaba cierta experanza de operar transformaciones en la realidad circundante, ya se habían hecho cosas mucho más experimentales desde hacía unos cuantos años que esas cosas facilonas, eso sí, las habíamos escuchado cuatro o aparecieron de banda sonora en documentales de la 2 sobre la energía atómica y sus riesgos o en dustopías Gore españolas o italianas, que ya empezaba a poderse enseñar media teta o recrear al hombre lobo mientras no se proclamase abajo el caudillo.

Pero es cierto que ese instrumento revolucionario (y por esos años tan irreverente o más que una strato) tuvo que infiltrarse en música banal, simpática, festiva a más no poder, de la última de la verbena (en mi banda era el poutpurri del conejo de la Loles), y, así, entreverado, un Minimoog, en una canción de tipo alemán cervecera, o un himno intrascendente y optimista, se aceptaba, y la sociedad se acabaría rindiendo a esos timbres de diente de sierra con Lfo punzantes, eléctricos y gamberros.

Qué se nos ocurrió tararear o toquetear la primera vez: alguno recordaría a Bach, otros a Emerson y otros a Fitipaldi (en una apurada de frenada). El sinte invitaba a ser irreverente y gamberro; yo no he pasado de esa primera vez.

La primera vez con un sinte no fue cualquier cosa para muchos, ver el mar por primera vez quizás fue más impresionante; pero como tocamiento, como reservado (casi íntimo y de alcoba o asiento trasero) fue una cosa sería, casi pecado, tocarle el coño a una a los quince años era una conquista; tocar un sintetizador a los quince años era como si los extraterrestres te hubieran elegido y concedido algo que los demás ni se imaginaban.

Salí de la tienda del poblemas iniciado, ya ni habría secta ni adicción que me atrapase, y al poco empezaron a caer como moscas (no habrían tocado aquel talismán transformador y salvífico que nos habían dejado los sabios interestelares, Robert Moog era pues uno de aquellos sabios semitransparentes del consejo extraterrestre de desidiotizadores de Logroñeses.

El poblemas mostró en su escaparate al monolito de la película de Kubrick, pero con el extra de los botones para comunicarse con el ordenador rebelde, con Hal 9001.

Crucé Jorge Vigón, fui hacia los bares de esa zona, el Robínson y todo eso, mirando a la. ciudadanía como a trogloditas anclados en la caspa y lo antiguo, y no exageraba tanto: ellos no habían tocado un Minimoog y yo sí.

Alguien escribió:

#172 por La madre del topo.

... El poblemas mostró en su escaparate al monolito de la película de Kubrick, pero con el extra de los botones para comunicarse con el ordenador rebelde, con Hal 9001.

Crucé Jorge Vigón...

Ya siento romper el encanto poético de tus recuerdos, pero ¿No sería "Micro-Disc"?.

En esta tienda es donde vi por primera vez un sinte real, y acabé comprándome el Korg 770, que no me llegaba para más.

[ЯKR] escribió:

encanto poético

Prosa pura y dura

[ЯKR] escribió:

acabé comprándome el Korg 770

Pues como no seas Emilio Retortillo, el carnicero, no se ocurre quién si no...

Alguien escribió:

#174 por RecuerdosdeCostantinopla

Pues como no seas Emilio Retortillo ...

Pues no soy Emilio. Yo nunca me he dedicado a la música y tampoco he frecuentado esos ambientes; Lo de DJ en Borgia fue durante unas pocas semanas, el titular era Nacho y yo sólo le sustituí unos días en verano.

Respecto a Emilio, he visto esto:

http://elidiomadelosdioses.com/emilio-retortillo-una-historia-de-musica-y-afasia/

Yo a Emilio (que hacía años y años que no sabía nada de él) le vi hacia los años que comenta el artículo que le dio el ictus, y hacía ya alguno que le había dado, así que no se me ocurre otra cosa que le hayan dado dos... Le vi en fiestas de Ezcaray tocando en un plaza más recoleta que la principal, tocaba temas él sólo ayudado de acompañamientos programados en midi y sonaba estupendamente, bastante más recuperado que lo que he leído en ese artículo.
He llamado a un amigo ; pero no estaba al corriente y ahora al bajista que tocaba con ambos (Hugo el del barcito de la plaza Martínez Zaporta, no recuerdo el nombre del bar, van moteros de Harley) y no me ha cogido.
O sea que compraste otro como el de Emilio al poblemas..., le compraba bastante a Letusa.

RecuerdosdeCostantinopla escribió:

tocarle el coño a una a los quince años era una conquista; tocar un sintetizador a los quince años era como si los extraterrestres te hubieran elegido y concedido algo que los demás ni se imaginaban.

Qué grande ésta cita! muy gráfica, expresa fielmente lo que debía suponer tal hito.

Mi "primera vez" fue realmente la adquisición de primer sintetizador, un Korg MS-20 que me compré a los 21 años con mi primer sueldo de Observador de Meteorología del Estado, bueno realmente lo compré en 6 "cómodos" plazos con sus respectivas pólizas. Creo que me costó unas 52.000 pesetas en el año 1980, en la famosa tienda Leturiaga que había en la calle de la Corredera Baja de Madrid.

En esta tienda, Victor Navarro, el vendedor de pianos, órganos y sintetizadores demostraba, con un excelente virtuosismo sobre las teclas, las últimas novedades de Korg, Yamaha, Roland, Sequential Circuíts, etc. Recuerdo perfectamente ver juntos en ese sótano los Korg PS-3200 y 3100, el MS-20, el MS-10, el SQ-10, el Trident, las serie CS de Yamaha, el Prophet-5, el Jupiter-8, etc. un paraíso del que salía uno siempre babeando. Yo quería un polifónico, pero la pasta no daba para más y me tuve que conformar con el MS-20.

Los teclistas de los grupos de rock sinfónico y progresivo de entonces, finales de los 70s, (Pink Floyd, Camel, Emerson-Lake&Palmer, Yes, King Crimson, PFM, etc.), los especializados en la música electrónica de entonces, "planeadora" (Klaus-Schulze, Tangerine-Dream, Neuronium, Kraftwerk, etc.) o los del rock nacional (Iceberg, Imán C.I., Triana, Bloque, Alameda, Cai, etc.), manejaban los primeros sintetizadores analógicos que existieron y su sonido nos cautivó a mucha gente, yo diría que nos tenían hipnotizados. Ellos fueron los "culpables" de esta afición o vicio.

Ese MS-20 tuvo un compañero un año después, el Korg Delta una mezcla entre sinte polifónico y String. En 1983 los vendí los dos para comprarme un Roland JX-3P con el PG-200. Esos fueron mis principios. Toco por placer, en casa, casi siempre solo, no soy músico, ni tengo especial habilidad pianística, me gusta hacer sonidos y grabar mis propias ideas. Tengo GAS con casi todo lo que sacan, pero ni la pasta ni el espacio disponible dan para más.

Ahora, en 2020, 40 años después, a punto de jubilarme, creo que con mi último sueldo voy a hacer lo mismo que hice con el primero, comprarme un sintetizador analógico, y paradójicamente (las vueltas que da la vida), va a ser también un Korg MS-20 FS, aprovechando el modelo que Korg reedita/resucita 40 años después. Quien me hubiera dicho en 1980 que en 2020 me iba a comprar el mismo sinte. Me parece un "final" fantástico.

Joder Navarro, y el hijo, que hizo el superior de guitarra y se fue a Cristóbal Bordiú.
Aunque era más de pianos que de sintes...

Con 6 añitos mi tio nos regaló un organo sonitoy de color azul. Yo flipaba. Monofónico, un solo sonido, pero solo era un niño. Ya en los 80, Azul y negro lo petaba, y Tino Casal era lo mejor del mundo, esa voz, esos arreglos...recuerdo también aquellos discos recopilatorios con "Born to be alive" de Patrick Hernandez, luego descubrí a Jean Michell Jarre, y me acuerdo de como con unos 11 años fui con mi madre a una tienda de instrumentos a preguntar por esos sintetizadores que veía en los programas musicales, Roland, Korg, y el vendedor de la tienda empeñado en que para mi lo mejor era un organo de esos de madera con dos teclados, y ritmo bossanova y tal...y yo queriendo emular a Azul y negro...Y entonces escucho a Duran Duran con aquellos golpes de sinte orchestra hit en "A view to a kill" y yo soñando con esos sintes y sonidos...así hasta mi primer Casio PT20, que me costó unas 10.000 ptas de la época, que no se ni como ahorré ese dinero, que ponía encima del sonitoy y ya tenía un combo de teclados y podía tocar a dos manos. Mi primer radiocassette estereo a los 15, y ahí descubrí como sonaban las canciones de verdad, y no grabadas en mono directamente de la tele cuando daban "Tocata", Y de ahí a un casiotone MT-240, y haces experimentos con cables y descubres que puedes mezclar señal de audio si empalmas dos cables, y ya podía grabar en el radiocassette el teclado y una guitarra española, de la que le sacaba el sonido pegándole un auricular de los grandes en el cuerpo, y sonaba. Y ya de mayor te lías, te gusta la música y ahorras y te metes en un Korg 01W/fd sin tener ni idea de como secuenciar, pero todo se aprende...y en fin, que esto no tiene fin, pero siento un poco de envidia sana por la juventud de ahora ya que todo es más barato y mejor, que antes comprar cualquier equipo musical era una sangría.